El alto gobierno de Rusia está discutiendo la posibilidad de usar activos digitales, como bitcoin (BTC) y otras criptomonedas, para realizar pagos internacionales, ante las «limitaciones» de liquidez que enfrenta su sistema de pagos tradicional, que está sancionado por la invasión a Ucrania.
Así lo dejó saber el director del Departamento de Política Financiera del Ministerio de Finanzas de Rusia, Ivan Chebeskov, durante un debate en la plataforma Rusia Unida, reportó la agencia Interfax. ..
«El tema del uso de tales monedas digitales como transacciones de trueque para pagos internacionales se está discutiendo activamente. Si la moneda digital se reconoce como propiedad, en principio, en el marco de las transacciones de trueque con dicha moneda digital, será posible llevar a cabo operaciones sobre la actividad económica exterior», dijo el funcionario ruso.
Según explicó, es un tema que «amerita atención», al reconocer que, actualmente, Rusia «tiene posibilidades limitadas de liquidación en la infraestructura de pago clásica y tradicional».
Tras la invasión a Ucrania, el sistema financiero de Rusia y la economía en sí sufrieron serias sanciones que, entre otras cosas, derivaron en la expulsión de varios bancos rusos del sistema de pagos SWIFT, que les permitía entrar en el mercado de divisas internacionales.
Sin mayores detalles
Si bien el funcionario del Ministerio de Finanzas de Rusia habló a favor del uso de estos activos para los pagos internacionales, no queda claro de dónde provendrían dichas monedas digitales o de qué forma pagarían usándolas. Tampoco con quién negociarían o si habría países o empresas dispuestas a aceptar estos activos como pago.
En todo caso, Rusia es un país que poco a poco se ha abierto al uso de las criptomonedas, en parte, a raíz de la crisis económica generada por la invasión a Ucrania. Aunque gobierno de Putin se ha sentado a conversar sobre esto, hay diferimiento al considerar si el ecosistema puede ayudar a Rusia a evadir las restricciones.
De cualquier forma, lo que dijo hoy Ivan Chebeskov no hace más que demostrar el interés del gobierno ruso por integrar a bitcoin y a las criptomonedas en la economía. De hecho, es una idea que se maneja desde hace varios meses, tal como lo sugirió el primer ministro de ese país, Mikhail Mishustin.
Así las cosas, no queda más salvo esperar a que Rusia termine –o no- de incluir a bitcoin en su portafolio, lo que lejos de malponer a la moneda, más bien ayudaría a reforzar la narrativa que BTC puede usarse, incluso, para cumplir con convenios y compromisos internacionales entre países.